Uno puede, por especular no más, pensar que la actitud del presidente Obama parece inteligente en su necesario manejo de los intereses de Estado Unidos. Hace el balance de su opresiva presencia en el medio oriente dominada por el interés petrolero y la costosa presencia de Israel, no ya como justa bandera de un pueblo migrante, sino como irritante y belicista para los islámicos custodio del petróleo.
En ese curso, nervioso por las alianzas de Rusia con China y su dominio del Pacífico.
Negocia con Irán y abre postigos a Líbano, pensando e que es una buena manera de lidiar con los radicales islámicos, con más potencia desestabilizadoras que todos los otros musulmanes juntos.
Así que Netanyahu y sus ultras resultan incómodos, incluso para el lobby judío en USA.
Coincide con la prédicas de otro inteligente líder actual, el Papa Francisco.
Abre negociaciones con una cuba en una caída libre que la hace barata con lo que lanza una señal de firmeza y amplitud política que comunica a la vez seguridad.
Con el peculiar gobierno venezolano, que se ha salido de toda ideología o previsión posible, es difícil lidiar. Le pasa a Obama como nos pasa a nosotros: cualquier cosa puede suceder.
Esa actitud de Obama coincide con las predicciones de los sauditas:
There may be some truth in those theories, writes Elias Hinckley, strategic advisor and head of the energy practice with international law firm Sullivan and Worcester, but they miss the deeper motivation of the Saudis. Saudi Arabia, he says, sees the end of the Oil Age on the horizon and understands that a great deal of global fossil fuel reserves will have to stay underground to avoid catastrophic global warming. “That’s why it has opened the valves on the carbon asset bubble.”
Todo esto es posible porque el petróleo pierde su encanto. Los mas autorizados especialistas coinciden con el aforismo muy citado (http://www.altag.net/)
José Luis Cordeiro) del jeque Ahmed Zaki Yamani, célebre ex ministro de Petróleo de Arabia Saudita, quien dijo que la era de piedra no se había terminado por falta de piedras, al señalar que la era del petróleo no se terminará por la escasez de petróleo.
La era del petróleo ha acompañado grandes logros pero también la más grave de todas las depredaciones: la de los humanos contra los humanos. Más de un centenar de millones de muertos en guerras abiertas o escondidas. Revoluciones devenidas en dictaduras, populismos desmandados como el de nuestro país, y una difícil de revertir contaminación atmosférica, etc.
Con lo digital Occidente llega al extremo de su expansión, que es también la expansión del petróleo. El extremo de esa expansión, como otras veces, con otras grandes culturas, implica la emergencia de sus fusiones, de sus mestizajes y la diversidad. Es difícil conservar los pecados ocultos.
En artículo anterior ya adelantábamos esto, agregando la grave penuria que esto significa para Venezuela, que significará miseria, conflictos sociales y grandes retos, y que la salida ya la habían adelantado los sauditas cuando dedicaban grandes inversiones a la preparación de la gente para ese final de la era petrolera.
Se puede argumentar que esa era todavía durará unos veinte años más, pero los estudios de las grandes, grandísimas transnacionales que están en el negocio, trabajan para el futuro, siempre lo han hecho, (como la ha hecho la Rockefeller Fundación, al dedicar lo mejor de sus recursos a las energías renovables, con un gran sentido de los negocios, otra vez) lo que quiere decir que sus políticas de inversión y expansión se anticipan. Una anticipación que no supondrá a Venezuela y su petróleo como una prioridad. Sobre todo cuando las condiciones políticas de Venezuela implican un costo de imagen y un alto riesgo.
Eso es un problema central de nuestro diseño político y del papel de la educación en esa grave y miserable condición.
A corto plazo no va terminar la era del petróleo, son muy profundas sus raíces y los intereses que la acompañan, lo que se percibe en la discusión sobre su final y los miles que en ella participan. Pero la producción superará la demanda y los precios no hacen sino caer. Y eso, para nosotros es muy grave.
José Luis Cordeiro
Armando J. Pernía
El experto en energía y “futurólogo” venezolano, José Luis Cordeiro, parafrasea al jeque Ahmed Zaki Yamani, célebre ex ministro de Petróleo de Arabia Saudita, quien dijo que la era de piedra no se había terminado por falta de piedras, al señalar que la era del petróleo no se terminará por la escasez de petróleo. Más aún, afirma que en los próximos 20 años, “los combustibles fósiles serán cada vez más fósiles”. - See more at: http://www.altag.net/la-era-del-petroleo-terminara-en-20-anos/#sthash.4Xi56lwp.dpuf
Arabia Saudí
Ante esta situación, en las universidades saudíes ya se están haciendo grandes esfuerzos para diversificar la preparación del capital humano. Pero cuanto más tiempo tengan para preparar al país para la nueva era energética mejores serán los resultados. El objetivo es 'estirar' lo máximo posible la era del petróleo en el mundo, centrando la estrategia sobre todo en las potencias emergentes, que son las que registran mayores crecimientos económicos y aún no han alcanzado el nivel de compromiso medioambiental que tiene algunos países como Alemania o los nórdicos.
Leer más: “El plan de Arabia Saudì para 'estirar' la era del petróleo lo máximo posible - elEconomista.es http://www.eleconomista.es/materias-primas/noticias/6626656/04/15/El-plan-de-Arabia-Suadi-para-estirar-la-era-del-petroleo-lo-maximo-posible.html#Kku89PyoxfUtCvAi